- La modernización del Legacy es crítica para que las organizaciones se adapten a la era de la transformación digital. El 43% de las empresas líderes consideran que sus modelos de negocio dejarán de existir en los próximos cinco años
Las organizaciones están afrontando múltiples presiones para modernizar sus operaciones siendo 2017 un punto de inflexión para que los mainframes antiguos pasen de ser un activo a un pasivo. Esta es la visión de una de compañías más tecnológicas del panorama actual, TmaxSoft, que considera que el legado del mainframe puede actuar como un freno a la innovación, restando capacidades a las empresas para competir en la era digital.
Joshua Yulish, CEO de TmaxSoft, explica: “la vida útil de los modelos de negocio está acortándose rápidamente y sobrevivir en esta era de disrupción digital depende de la capacidad de las empresas de utilizar la tecnología para reinventarse continuamente y reaccionar con flexibilidad a las condiciones cambiantes del mercado. Las organizaciones que se han atascado en mainframes antiguos (que son casi obsoletos en relación al nuevo paradigma empresarial y hacen difícil explotar tecnologías como cloud computing) encontrarán esta disrupción especialmente dolorosa. Las compañías que estén viviendo su propio “momento kodak” necesitan abandonar sus antiguos mainframes y hacerlo rápido para defenderse de la competencia”.
Según el reciente Informe Transformación Digital de Microsoft, el 43% de las empresas líderes consideran que sus modelos de negocio dejarán de existir en los próximos cinco años, mientras que más de la mitad de las sociedades prevé que la disrupción impacte en su sector en dos años.
TmaxSoft considera que las organizaciones ven limitado el alcance de su transformación digital al depender totalmente de estas tecnologías heredadas, que han estado utilizándose durante décadas. Un time-to-market lento ralentiza la innovación, el lanzamiento de nuevos servicios y responder a los competidores.
Por otra parte, la rápida consolidación de las nuevas tendencias como big data, gestión de la nube híbrida y el Internet de la Cosas (que ofrecen agilidad, velocidad, escala y alto impacto de los resultados de negocio) están generando un gran número de capacidades para la toma de decisiones estratégicas y tácticas. Muchas de las arquitecturas mainframe no soportan las exigencias de estas tendencias planteando enormes quebraderos de cabeza en empresas con tecnologías más lentas para seguir siendo competitivos y agiles. Sin el software, hardware o aplicaciones adecuadas, las organizaciones no van a poder sacar partido a estas nuevas iniciativas.
Las empresas no sólo incurren en altos costes de mantenimiento del mainframe también ven restringido su acceso al software de primer nivel. Existen también otras limitaciones serias al mainframe tradicional (estar encadenados a un único proveedor, exponerse al riesgo de condiciones de contratación de personas con las habilidades y experiencia para trabajar con esta tecnología obsoleta).
“La edad de la disrupción tecnológica ya ha llegado y las organizaciones deben hacer todo lo posible para garantizar su supervivencia frente a la competencia y a nuevos jugadores del mercado. Esto significa alejarse de los mainframes y aprovechar las nuevas tecnologías. Aquellas organizaciones que no reconocen la importancia de este hecho, corren el riesgo de sufrir graves consecuencias y depreciar su ventaja competitiva”, concluye su CEO Joshua Yulish.